Midriasis: 7 motivos por los que se dilatan las pupilas

¿Sabías que cuando se dilatan tus pupilas se produce midriasis? La midriasis fisiológica es una reacción normal de tus ojos a la penumbra y está controlada por el sistema nervioso simpático.

El sistema nervioso simpático se encarga de contraer y dilatar las pupilas, aunque en algunas ocasiones esta respuesta ocular no se realiza correctamente.

Cuando las pupilas se dilatan y no responden normalmente a los estímulos externos, es importante saber lo antes posible si esa midriasis es síntoma de una enfermedad grave, o está causada por un motivo circunstancial transitorio.

Midriasis

¿Qué es la midriasis?

Para comprenderlo mejor primero es necesario entender el funcionamiento de las pupilas.

Las pupilas se encargan de dar paso a la luz que se refleja en la retina, de esta forma los nervios de la retina procesan la información y la envían al cerebro en forma de imagen.

Dependiendo de intensidad de luz recibida, las pupilas se contraen y se dilatan dejando paso a la cantidad de luz óptima para ver bien sin que moleste o provoque algún daño ocular.

La midriasis es una dilatación de la pupila del ojo que se produce en condiciones de escasa iluminación o tras un periodo de inactividad (durmiendo).

Cuando la pupila está dilatada permite que penetre más cantidad de luz en el ojo, así en condiciones de escasa iluminación podemos ver mejor los objetos que nos rodean.

¿Qué diferencia hay entre midriasis y miosis?

La principal diferencia entre la midriasis y la miosis es que son justamente lo contrario.

La midriasis consiste en la dilatación de la pupila, y la miosis es la contracción de la pupila como respuesta a un aumento de luz u otro estímulo externo.

En condiciones normales el ojo humano contrae y dilata las pupilas de manera natural, adaptándose a los estímulos externos y a las condiciones de luz.

Cuando las pupilas no son capaces de responder a los estímulos externos, se produce una midriasis anormal, por eso es importante conocer la causa que la ha provocado.

Midriasis y miosis

¿Qué causa la midriasis ocular?

Nuestras pupilas se pueden contraer y dilatar por muchas razones, algunas por causas naturales, y otras a raíz de algunas enfermedades subyacentes.

1. Emociones y estados de ánimo

Las pupilas se pueden contraer y dilatar según nuestra actitud y nuestro estado emocional, si estamos ansiosos o ante situaciones tensas, las pupilas se contraerán (miosis).

Cuando estamos alegres, contentos o eufóricos, las pupilas tienden a dilatarse de forma natural (midriasis).

2. Exceso de iluminación

Cuando nos sometemos a un cambio drástico de iluminación (cuando despertamos y encendemos la luz) las pupilas se contraen para adaptarse al exceso de luz.

Cuando la luz es tenue, las pupilas se dilatan para poder recibir mayor cantidad de luz, mejorar nuestra visión y poder ver con claridad los objetos que nos rodean.

3. Ingesta de sustancias tóxicas, drogas o alcohol

La ingesta de ciertas sustancias tóxicas como drogas o alcohol también afecta a la dilatación de las pupilas, haciéndolas más grandes de lo normal.

En ocasiones puede durar varias horas o días, haciendo que el ojo no sea capaz de contraer la pupila ante estímulos externos como focos de luz.

4. Tras un periodo extenso de inactividad (mientras dormimos)

En las primeras horas del sueño nuestras pupilas se dilatan adaptándose a la ausencia de luz.

5. Ingesta de ciertos fármacos o antidepresivos

La ingesta de algunos fármacos o medicamentos también puede afectar de manera transitoria a la capacidad de adaptación de las pupilas.

6. A raíz de golpes o traumatismos

Los golpes o traumatismos pueden afectar al sistema simpático, haciendo que las pupilas no respondan de forma adecuada a los estímulos externos.

En estos casos esta alteración de la pupila suele ser síntoma de un problema o enfermedad de mayor gravedad que generalmente afecta al sistema nervioso.

7. Enfermedades oculares

En ocasiones esta patología ocular suele ser signo de enfermedades subyacentes como la uveítis, el glaucoma o la retinopatía diabética.

En estos casos estas enfermedades oculares causan dilatación, haciendo que el ojo no sea capaz de responder correctamente ante los estímulos externos.

Midriasis pupilar

Tipos de midriasis

Existen diferentes tipos de midriasis, en general las más comunes son:

1 Midriasis fisiológica

Ocurre cuando la pupila se dilata por causas naturales como las emociones, la disminución de luz o por otra causa natural que no implique ninguna enfermedad subyacente.

2 Midriasis Unilateral

Ocurre cuando los dos ojos tienen diferente dilatación de las pupilas. Este tipo de midriasis suele presentarse en casos de migraña, glaucoma, estrabismo o ictus isquémico transitorio.

 3 Midriasis Bilateral

Se da cuando ambos ojos tienen una dilatación de la pupila mayor de lo normal. Esta alteración ocular puede producirse a raíz de enfermedades como el alzheimer o el glaucoma.

4 Midriasis Arreactiva

En este caso las pupilas se dilatan, pero no son capaces de contraerse ante un aumento considerable de luz intensa.

Este tipo de alteración ocular suele ser consecuencia de algún daño cerebral o paros cardíacos.

 Factores de riesgo

Aunque cualquier persona está expuesta a sufrir algún tipo de midriasis anormal, existen ciertos factores que pueden ser desencadenantes de esta patología ocular, como por ejemplo las personas que sufren: migraña, retinopatía diabética, heterocromía provocada por un traumatismo o glaucoma.

¿Cómo se diagnostica la midriasis pupilar?

A la hora de diagnosticarla es esencial que un oftalmólogo especialista realice una revisión completa de las pupilas y del fondo de ojo para descartar otro tipo de patologías oculares.

Si el especialista detecta que el paciente padece algún tipo de anomalía en el funcionamiento de la pupila, es posible que sea signo de una enfermedad ocular subyacente de mayor gravedad.

Tratamientos para la midriasis pupilar

El tratamiento dependerá de la causa por la que se haya producido esa midriasis anormal, generalmente cuando la pupila sufre anomalías crónicas son síntoma de una enfermedad ocular, o problema de salud más grave.

Dependiendo del tipo, de la causa, el tratamiento variará de una persona a otra.

Con frecuencia, cuando esta anomalía ocular es síntoma de daño cerebral, es irreversible.

Consecuencias de la midriasis como patología

Cuando se produce una midriasis anormal como signo de un problema de salud grave, suele venir acompañado de otros síntomas como: visión borrosa, dolor de cabeza, fiebre, náuseas, alta sensibilidad a la luz (fotofobia), pérdida de visión, dolor en los ojos.

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